Joven de irresistible belleza
Mientras, el sabio tentaleaba con su mano entre la mesa en penumbra, buscando el viejo papiro donde sigue el relato de la amante del divino falo. Y lo que hacía nos dejaba hacer, leer y ver, por el hecho de que la vida real rebasa a toda época y llena las letras de vida sin tiempo ni espacio.